sábado 24 de agosto de 2002

*

Tomado del libro Ambages, de César Fernández Moreno. Monte Avila Editores.

a medida que va perdiendo dientes

el peine va ganando mango

comprendí que lo sucedido era irremediable

sólo restaba aceptar mi destino*

* había sonado el despertador

cuando un intelectual dice no entiendo

es cuando va a pulverizar a su adversario

el verdadero amigo de la casa

se anima a echar al perro cuando molesta

hay que aceptar la muerte o suicidarse

hay que ser natural

aunque sea a costa de un gran esfuerzo

Hay dos clases de personas

los resentidos y los desesperanzados*

*cuando los desesperanzados se dan cuenta de esta división

es que se están volviendo resentidos

la muerte qué pérdida de tiempo!

la muerte qué porvenir asegurado!

mi cama me trata como a un inválido

para mirar la hora siempre es tarde

para vivirla siempre es temprano

ya estoy aprendiendo a escribir

todavía no sé leer

César Fernández Moreno