Si uno sigue el hilo de esta reflexión, comprende por qué el destino de la cultura de masas estará siempre ligado al ensayo de desplegar lo exento de interés como lo más llamativo. Ella seguirá necesitando estrategias encaminadas a llamar obligatoriamente la atención, porque su propósito no es otro que llevar a un primer plano objetos y personas triviales; objetos todos ellos por tanto en los que, por decirlo con Spinoza, no hemos visto nada que no hayamos visto antes en otros o que -sólo queda añadir- hemos visto hasta la saciedad.
Hay que destacar el hecho de que aquí las personas también son comprendidas bajo un esquema teórico que corresponde a cosas. No es ninguna casualidad que la cultura de masas, dondequiera que se imponga, apueste en el futuro por la alianza entre trivialidad y efectos especiales. Peter Sloterdijk; El desprecio de las masas
Ensayo sobre las luchas culturales de la sociedad moderna.