2.5.2017/22

Si uno sigue el hilo de esta reflexión, comprende por qué el destino de la cul­tura de masas estará siempre ligado al ensayo de desplegar lo exento de interés como lo más llamativo. Ella seguirá necesi­tando estrategias encaminadas a llamar obligatoriamente la aten­ción, porque su propósito no es otro que llevar a un primer plano objetos y personas triviales; objetos todos ellos por tan­to en los que, por decirlo con Spinoza, no hemos visto nada que no hayamos visto antes en otros o que -sólo queda aña­dir- hemos visto hasta la saciedad.
Hay que destacar el hecho de que aquí las personas también son comprendidas bajo un esquema teórico que corresponde a cosas. No es ninguna ca­sualidad que la cultura de masas, dondequiera que se impon­ga, apueste en el futuro por la alianza entre trivialidad y efec­tos especiales. Peter Sloterdijk; El desprecio de las masas
Ensayo sobre las luchas culturales de la sociedad moderna.