16.5.2020.33

le hablé de (…) mi padre, que trabajaba noche y día. «¡Ah! Señor, son vidas en las que no se guarda nada para sí, ni un minuto, ni un placer; todo, enteramente todo, es un sacrificio para los demás, son vidas entregadas…
Proust; En busca…4 /TManzano