jueves 21 de noviembre de 2002

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caminar por las calles es una sorpresa constante, por el tema de los carteles;
justamente uno enfrente del otro, escritos por distinta mano, decían estas cosas;
resistir es perder
gracias desobediencia por hacerme feliz
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ir al teatro sin ganas, solamente por cumplir con alguien;
presentarse en una fiesta sin ganas, solamente por cumplir con alguien:
y resultan ser lugares donde ni siquiera se anota en una planilla quiénes han asistido al evento y quiénes no;
y hay otro escalón en la vía del descenso a los infiernos, y sucede cuando uno acompaña sin ganas a quien tenga que presentarse sin ganas en un lugar, solamente por pensar que tiene que cumplir, y resultan ser lugares donde ni siquiera se anota en una planilla quiénes han asistido al evento y quiénes no;
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no todos los gatos comen libélulas, pero esta gata sí que las come; las come cuando jugó un buen rato a maltratarlas, y solamente después de que le parece que la libélula está suficientemente muerta;
los axolotes, especie de dragones pequeños con cuatro patas que respiran medio segundo fuera del agua pero viven todo el tiempo bajo el agua, comen en cambio solamente lo que se mueve; y si uno quiere alimentarlos, tendrá que agitar pacientemente delante de sus ojos de un lado al otro un pedazo de carne, hasta que el axolote decide que el pedazo de carne está suficientemente vivo como para comérselo de un bocado
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ajá, pensó cuando le tiraron encima a ese hombre mientras estaba sentado mirando en la práctica de artes marciales, y se lo tiraron encima justamente en el lugar adonde se había movido apresuradamente, para evitar que se lo tiraran encima; y en el trámite se golpeó fuertemente un tobillo con el borde de madera que rodea el espacio de práctica; y su único comentario fue: ajá, que pudiera ser un equivalente de: no hay nada que hacerle, y frases similares
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su compañero de práctica de esta mañana tuvo dificultad por falta de aire al llegar a la clase, para subir los dos tramos de escaleras, y le comentó que ayer casi se había muerto trabajando, de tanto aspirar los productos nocivos que estuvo usando para plastificar unos pisos de madera;
dejar la vida en el trabajo no es algo que dejó de ocurrir cuando terminó la edad media