(…) mi padre (…) delegaba en su mujer, aunque no sin numerosos comentarios aparte calladamente irónicos. La ropa (…), la casa (…), el coche (…): todas estas cosas las decidía ella.
Nada que temer; Julian Barnes; Traducción: Jaime Zulaika Goicoechea
(…) mi padre (…) delegaba en su mujer, aunque no sin numerosos comentarios aparte calladamente irónicos. La ropa (…), la casa (…), el coche (…): todas estas cosas las decidía ella.
Nada que temer; Julian Barnes; Traducción: Jaime Zulaika Goicoechea