1.4.2022.41

(…) Yo no tenía nada que ofrecer a esta criatura de Dios. Nos separamos. Mi anfitriona me dijo muchas cosas que no comprendí (…); sin duda se trataba de deseos de felicidad; si el cielo no los ha oído, no es por culpa de quien los expresó,(…)

Chateaubriand

Memorias