El manantial piensa, el arroyo discurre.
Pensar no es discurrir: discurrir es huir del pensamiento.
La mano del poeta no tiembla: tiembla su corazón.
Las cosas como son. ¿Cómo son las cosas?
José Bergamín /J. D. Aguilar
El manantial piensa, el arroyo discurre.
Pensar no es discurrir: discurrir es huir del pensamiento.
La mano del poeta no tiembla: tiembla su corazón.
Las cosas como son. ¿Cómo son las cosas?
José Bergamín /J. D. Aguilar