(…) Llegó julio de 1830; mi fortuna y mi crédito siguieron el destino de las cenizas de Tasso. Estas cenizas parecen poseer la virtud de rehuir toda opulencia, de rehusar todo esplendor, de sustraerse a todo honor; (…)
Memorias de ultratumba 1848
Chateaubriand
Trad. Monreal