26.5.2023.2

(…) que ya no parecía que fuera a conseguir marido. Pero él, que sufría la maldición de la sinceridad incluso en lo tocante a sus preocupaciones más profundas, sabía perfectamente cuál era la cuestión. (…)

La escuela de Freddie; Penelope Fitzgerald
Traducción Mariano Peyrou