lunes 12 de mayo de 2003

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estábamos sentados y el vecino de arriba corrió una silla sobre nuestro techo, haciendo mucho ruido; pero no hay ningún vecino arriba; no hay ninguna cosa arriba de ese techo, fuera de algún gato, que jamás usar&iacute,a sillas;
enseguida, alguien en la casa vecina subió apurado la escalera de madera, largamente, interminablemente, cuando todos sabemos que la casa vecina termina mucho más abajo, y que no tiene ninguna escalera que suba a ninguna parte;
por eso, como escuchamos cosas que no existen, podemos pensar tranquilamente en que tal vez el silencio contenga todos los sonidos, y que en esos momentos en que no escuchamos nada, en realidad sea porque esté pasando de todo.