21.11.2018c
Tanta demasía de iglesias que uno no puede orar sus propias plegarias. Finnegans Wake; Joyce, traducción Zabaloy
Tanta demasía de iglesias que uno no puede orar sus propias plegarias. Finnegans Wake; Joyce, traducción Zabaloy
pasaban tan desgarradores momentos con gritos jubilosos (…) llorando por diversión, él por marcharse, porque nunca fueron más felices, hu hu, que cuando eran miserables, ha ha Finnegans Wake; Joyce, traducción Zabaloy
las semillas del hola y chau que a troche y moche ha desparramado Finnegans Wake; Joyce, traducción Zabaloy
regalo plan A por no poder usarlo nunca
Yo te sobrentiendo, ¿me subentiendes? Finnegans Wake; Joyce, traducción Zabaloy
Deja la carta que nunca comienza ir al encuentro de la última que eventualmente llega al final, escrita en humo y borroneada por bruma y firmada de soledad, sellada en la noche. Finnegans Wake; Joyce, traducción Zabaloy
señalar algo para que alguien más lo vea, descubrir que nadie más puede verlo, tanto, que se duda de estar viéndolo, que se duda de haberlo visto, y habiendo pasado todo eso, ya no se esperan más complicidades para nada, nunca
2 Ni un alma para ser salvada ni un cuerpo para ser pateado. Finnegans Wake; Joyce, traducción Zabaloy
después de todo, cada vida es su propio rompecabezas
Con sollozos por su trabajo, con lágrimas por su afán, con horror por su escualidez pero con ínfulas por su perdición, vea, el pobre gaucho changuea cuando un guacho lo conchaba. Finnegans Wake; Joyce, traducción Zabaloy