Pero los orígenes de esos grandes acontecimientos son como las fuentes de los ríos: ya podemos recorrer la superficie de la Tierra, que no las encontramos.Marcel Proust; La fugitiva /En busca del tiempo perdido 6 /Traducción Carlos Manzano
Hay momentos en la vida en que nace como una hermosura de la multiplicidad de los problemas que nos asedian, entrecruzados como motivos wagnerianosMarcel Proust; La fugitiva /En busca del tiempo perdido 6 /Traducción Carlos Manzano
los acontecimientos no están situados en el conjunto de reflejos mostrados en el pobre espejito que lleva ante sí la inteligencia y que ésta llama futuro, (…) un acontecimiento (…) raras veces ocurre solo.Marcel Proust; La fugitiva /En busca… 6 /T. Carlos Manzano
y el miedo es en cierta medida —como yo lo experimenté, al acudir a la comisaría— un revulsivo al menos momentáneo y bastante activo de las tristezas sentimentales.Marcel Proust; La fugitiva /En busca del tiempo perdido 6 /Traducción Carlos Manzano
para remediar un acontecimiento desgraciado (las tres cuartas partes de los acontecimientos lo son)Marcel Proust; La fugitiva /En busca del tiempo perdido 6 /Traducción Carlos Manzano
El hombre es el ser que no puede salir de sí mismo, que sólo conoce a los demás en sí mismo y, al decir lo contrario, miente Marcel Proust; La fugitiva /En busca del tiempo perdido 6, /Traducción Carlos Manzano
no vemos solución favorable alguna. No pensamos en la que se produce con la mayor frecuencia y que también es favorable: no logramos cambiar las cosas conforme a nuestro deseo (…).Marcel Proust; La fugitiva /En busca del tiempo perdido 6, /Traducción Carlos Manzano
las fibras se entrecruzan en un retículo impalpable que casi posee la sustancia del espacio vacíoEl papel más fino del mundo: Guillermo Piro; Perfilhttps://www.perfil.com/noticias/columnistas/el-papel-mas-fino-del-mundo.phtml
los platos parecen apetitosos y me hacen acordar que alguna vez he comido bienLa varita mágica: Quintín; Perfilhttps://www.perfil.com/noticias/columnistas/la-varita-magica.phtml
los nerviosos, irritados a cada paso contra enemigos imaginarios e inofensivos, se vuelven, en cambio, inofensivos en cuanto alguien se lanza a la ofensiva contra ellos (…),Marcel Proust; La prisionera /En busca del tiempo perdido 5 /Traducción Carlos Manzano