1.8.2020.5

[c92] se trata de Quevedo. (…) cuyos últimos versos dicen así:
Oh Roma, en tu grandeza, en tu hermosura
huyó lo que era firme y solamente
lo fugitivo permanece, y dura.(…)<<
La vida de Samuel Johnson, James Boswell, Edición Miguel Martínez-Lage