¡El duque de Borbón, Fontanes y yo igualmente proscritos, buscando en tierra extranjera, bajo el techo del pobre, un abrigo contra la misma tormenta! (…).[13]
[13] Virgilio, Eneida, III, 395: «Los hados encontrarán su camino.» <<
Memorias 1848
Chateaubriand
Traducción Monreal