14.2.2023.12

Venecia, (…) 1833
(…) En otro tiempo, se encerraba en un convento a inocentes criaturas prácticamente acabadas de salir de la cuna: sus padres no las veían más que a través de los barrotes de la celosía y la mirilla de la puerta.
Memorias 1848
Chateaubriand
Traducción Monreal