lunes 2 de agosto de 2010

*
cualquiera sabe que generalmente no se saca nada con enojarse, pero esa evidente inutilidad no es lo que le molesta a la gente que se anda enojando sin poder evitarlo;
lo que le molesta en el alma a toda esa gente es que enojándose sin poder evitarlo, está demostrando sin poder evitarlo una tremenda inocencia que no debería evidenciarse en un mundo tal