domingo 2 de enero de 2011

*
cuando se pierde un ser querido y muy querido, es como morir un poco, digamos, que es como perder la mitad de la vida,
cuando algo sale mal y muy mal, una pérdida afectiva, una separación, un divorcio, una partida, es como morir un poco, digamos la mitad,
cuando se pierde la fuente de ingresos, y no se pierde una sola vez, es como morir un poco, digamos, la mitad cuando ocurren la invalidez, la enfermedad, la disminución física o psíquica permanentes y progresivas o brutales, es como morir un poco, digamos, la mitad
y todo esto, que tan amargante se presenta, el viejo Zenón de Elea en lugar de considerarlo tragedias de cualquier vida que se precie, podría haberlo considerado muy bien una paradójica demostración de posible existencia de la vida eterna
y eso, si hubiera sido una persona coherente, por las mismas razones explicadas más abajo, por las que vería imposible en su célebre paradoja, agotar el infinito derrotero de buscar eternamente la mitad de la mitad, razones por las que Aquiles, el corredor arquetípico, nunca podría llegar a alcanzar a la lenta tortuga en su carrera, por esa cosa de las paradojas de Zenón de Elea.

John Perry y Michael Bratman: Aquiles y la tortuga. Puzzles and paradoxes, en Introduction to Philosophy. Classical and Contemporary Readings, Oxford University Press, Nueva York-Oxford 1986, p. 790. Textos de Diccionario Herder de filosofía.
Supongamos que Aquiles y la tortuga inician una carrera. Puesto que Aquiles es más veloz, concederemos que la tortuga tome una ventaja de 10 metros. Suponemos que la tortuga puede recorrer 1 metro por segundo y que Aquiles puede correr 10 metros por segundo. Todo hace prever que Aquiles ciertamente alcanzará y superará a la tortuga. … Pero es fácil ver que esto es imposible.
….
Supongamos que Aquiles ha de correr desde el punto de salida S hasta el punto de meta M. Para hacerlo, debe realizar todos los siguientes pasos:
1. Correr hasta la mitad de la distancia entre S y M.
2. Correr, desde este punto medio, hasta la mitad de distancia que le queda hasta M.
3. Correr, desde este punto medio, hasta la mitad de distancia que le queda hasta M.
4. Correr, desde este punto medio, hasta la mitad de distancia que le queda hasta M, etc.

Este "etc." continúa claramente hasta el infinito. Esto es, el primer punto estó a sólo 1/2 de camino hasta M, el segundo está sólo a 3/4 de camino hasta M, el tercer punto a sólo 7/8 de camino hasta M, el cuarto punto a sólo 15/16 … Por esto Aquiles nunca logrará llegar hasta M.