20.2.2014
la decisión entre contar algo en pocas o muchas palabras debe tomarse atendiendo a la buena voluntad, la educación, la paciencia, la tolerancia, el interés y el tiempo que en general el esforzado oyente o lector no tienen ni quieren tener
la decisión entre contar algo en pocas o muchas palabras debe tomarse atendiendo a la buena voluntad, la educación, la paciencia, la tolerancia, el interés y el tiempo que en general el esforzado oyente o lector no tienen ni quieren tener
cuando cada uno se ocupa de sus cosas pareciera que el interesado se aburre y el mundo se aburre
en un vecindario de casas con puertas blindadas y rejas, de pronto ocurre que una amplia casa es usurpada por varias familias, y en esa casa nunca más se cierran las puertas ni las ventanas
Nadie piensa en nosotros (…) /Guillermo Piro /http://goo.gl/x6xYgz
la persona que vio excepcionalmente alguna cosa extraordinaria más de una vez corre el riesgo de descreer de sí misma cuando esas cosas ocurren y especialmente cuando no ocurren
quienes promueven la pureza debieran atender a que la naturaleza impura que permanece hace posible la vigencia de un mundo tal vez no siempre agradable, pero vivo por lo vario y no por lo ario
aspiramos a la perfección cuando tenemos mucho de qué arrepentirnos, aunque no es buen negocio arrepentirse de las cosas como han sido y como son
los imperfectos tranquilos que hacen su vida lo mejor que pueden y no se meten con nadie para mejorarlo o empeorarlo, son realistas en un mundo real
la pretensión vana de la pureza extrema del individuo que la ostenta como virtud, y no como defecto meramente aceptable y trabajosamente apenas tolerable por los otros, nunca faltará
los consejos que se reciben sin pedirlos deben escucharse en silencio contando mentalmente hasta diez o hasta diez mil, según sea el caso