(…) Napoleón (…) Mezclaba con la caída de los imperios insultos a las mujeres; se regodeaba en la humillación de lo que había derribado; (…) calumniaba y hería en especial todo aquello que había osado resistírsele. (…) Memorias 1848 Chateaubriand Traducción Monreal
(…) Napoleón (…) Su arrogancia igualaba a sus éxitos: creía parecer tanto más grande cuanto más rebajaba a los demás. Celoso de sus generales, los acusaba de sus propios errores, (…) les reprochaba duramente sus equivocaciones.(…) Memorias Chateaubriand Trad. Monreal
(…) Tras el desastre de Ramillies, no habría dicho jamás, como Luis XIV (…): «Mariscal, a nuestra edad ya no se está acertado.» Conmovedora magnanimidad que Napoleón desconocía. Memorias de ultratumba 1848 François-René de Chateaubriand Traducción José Ramón Monreal