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los hombres y las mujeres muestran diferencias al orinar, pues los primeros suelen hacerlo de pie donde se pueda, y las segundas, se agachan, se apoyen o no al hacerlo;
ambos pueden dejar gotas por aquí y por allí, y eso es ignorado por quienes no limpian baños, pero es motivo de gran fastidio para quienes sí lo hacen;
existe una cierta cortesía de los varones hacia las mujeres, de levantar la tabla ovalada con agujero antes, y bajarla después del acto de orinar;
pero los niños y muchos adultos varones no suelen tomarse esa molestia, o será que les da impresión tocar la tabla;
el profesor de artes marciales fue interrogado por esa cuestión que parece menor, pues habiendo niños en cantidad en el lugar en calidad de alumnos, el adulto no sabía si dejar la tapa para sentarse puesta, como cortesía para las damas, o dejarla levantada, para que los niños no la orinen, a lo que el maestro respondió que él dejaba siempre tapado el artefacto con ambas tapas, incluyendo así también la superior
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si se recomienda la paciencia se hace injusticia con la impaciencia, tan necesaria para tantas cosas útiles
