lunes 15 de diciembre de 2008

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los ingenieros: parte dos
fue bochornoso tener que disculparse en todos los idiomas con los ingenieros después de atosigarlos con reclamos por mandar un repuesto con nuevo diseño, a todas luces más ancho y más largo que debía entrar en un espacio donde ya antes costaba meter una pieza más corta y angosta; como los ingenieros insistían en decir que la pieza estaba bien, no hubo más remedio que probarla, contra todo sentido común, para advertir que entraba más pacífica y fácilmente que la pieza anterior más corta y más angosta;
pero lo verdaderamente imperdonable de todo el incidente fue que estamos más preparados para las catástrofes, que para que las cosas salgan bien, para que salgan como tienen que salir