sábado 12 de diciembre de 2009

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un hombre cuya edad estaba ya más cerca de los cien que de los
veinte, usaba el pelo normalmente largo o corto, según se mire, nada especial, pero un día, hace unos meses, se lo cortó todo, no dejándose ni un solo pelo, lo que le trajo la sorpresa de escuchar comentarios que decían que el nuevo corte lo hacía mucho más joven;
recientemente dejó crecer su pelo nuevamente a los niveles anteriores, lo que le trajo la sorpresa de escuchar comentarios que decían que el nuevo corte lo hacía mucho más joven;
lo que terminaba por hacerle comprender que verse más joven le ocurría de cualquier manera, hiciese lo que hiciese, o tal vez lo que no le decían era que antes se veía más viejo