2.8.2019d
perder es un ejercicio como cualquier otro
perder es un ejercicio como cualquier otro
—Un gran golpe para la pobre mujer —añadió el señor Kernan. —Sí por cierto —asintió el señor Bloom. Ahora le toca a ella reírse de él. /Ulises; Joyce, traducción Valverde
Los ayudantes tomaron a hombros el ataúd y lo llevaron adentro por la verja. Sólo peso muerto. Me sentía más pesado yo mismo al salir de ese baño. Primero el fiambre: después los amigos del fiambre. /Ulises; Joyce, traducción Valverde
El ataúd ahora. Llegó aquí antes de nosotros, muerto y todo. El caballo volviéndose a mirarlo (…)/Ulises; Joyce, traducción Valverde
Mezquino entierro: coche fúnebre y tres coches de duelo. Da lo mismo. Cordones de féretro, riendas doradas, misa de réquiem, salvas de cañonazos. Pompa de la muerte. (…) carrito de bollos y fruta. ¿Quién los comía? Los del duelo al salir./Ulises; Joyce, trad. Valverde
Chatas voces dublinesas le retumbaban en la cabeza. Aquellas dos bribonas esa noche en el Coombe, enlazadas bajo la lluvia. Ah, Mary perdió el alfiler de la braga. No sabía qué hacer para sostenerla en alto para sostenerla en alto. /Ulises; Joyce, traducción Valverde