Terry trajo las tres pintas que Joe pagaba y la hostia que casi pierdo la vista cuando me lo veo que aterriza una libra coño (…). -y más hay de donde éste sale, dice él. -¿Has robado el cepillo de los pobres, Joe? le digo yo. /Ulises; Joyce, /Edición García Tortosa
ve a un perro jugando con un Gran Maestro de ajedrez. (…) «¡Madre mía! ¡Un perro tan inteligente (…)!» A lo que el Gran Maestro responde: «Sí, pero no se crea que es tan listo: sólo me gana dos de cada cinco partidas».https://www.microsiervos.com/archivo/robots/brazo-robotico-cubo-rubik-una-sola-mano.html
me cago en la mar un jodido deshollinador (…) casi me mete los bártulos en el ojo. Me volví (..) cuando a quién me veo (…) sino al mismísimo Joe Hynes. -Hombre, Joe, le digo yo. (…) ¿Has visto (…)? -El hollín da suerte, dice Joe. /Ulises; Joyce, /Ed. G.Tortosa
La noche en que Gunn nos dio el palco. Afinando. Al sha de Persia es lo que más le gustaba. Le recordaría al hogar dulce hogar. Se sonó la nariz con la cortina además. Costumbre en su país quizá. Eso es música también. No es tan malo como suena. /Ulises; Joyce, /GTortosa
Cashel Boyle O’Connor Fitzmaurice Tisdall Farrell (…) rozó bruscamente (…) un cuerpo sin nervio. El mozalbete ciego -¡(…) dijo ásperamente, quienquiera que seas! ¡Estás más cegato que yo, hijo de la gran puta! /Ulises; Joyce, /Edición García Tortosa
El runruneo de aleteantes correas de cuero y el zumbido (…) de la central eléctrica incitaron a Stephen a proseguir. Seres sin ser. ¡Párate! Latido siempre fuera de ti y el latido siempre dentro. /Ulises; Joyce, /Edición García Tortosa
-¡Dios! exclamó. Se me olvidó contarle aquella de cuando el conde de Kildare le prendió fuego a la catedral de Cashel. ¿La conoce? Me jode haberlo hecho, va y dice, pero juro por Dios que pensaba que el arzobispo estaba dentro. /Ulises; Joyce, /Ed. García Tortosa
tener hijos es un vicio caro
se volvieron a la flama de la antorcha minúscula. (…) La cerilla en la mano levantada (…) se consumió en una larga suave llama y fue dejada caer. A los pies de ellos el punto rojo expiró : y aire enrarecido se cernió a su alrededor. /Ulises; Joyce, /Ed. García Tortosa
salió (…) de un seto y tras él venía una joven (…). El joven se quitó la gorra precipitadamente : la joven se inclinó con precipitación (…). El Padre Conmee los bendijo a ambos gravemente y pasó una fina página de su breviario. /Ulises; Joyce, /Ed. García Tortosa