Mes: julio 2019

Mi nombre es Patroclo, (…). Todo lo que vi aquel día, desde lejos, y que oí contar, quiero que ahora lo escuchéis vosotros, si es que queréis entender de qué clase de muerte tuve el gusto de morir. /Baricco; Homero Ilíada

Mi nombre es Patroclo, (…). Hace años (…) llegué a Ftía, (…). El rey tenía un hijo: se llamaba Aquiles. (…) Hoy sus huesos están mezclados con los míos, sepultados en la Isla blanca. /Baricco; Homero Ilíada

Pero yo era viejo. Ulises era viejo. Nosotros sabíamos que vieja era la larga guerra que estábamos librando, y que un día la ganaría aquel que fuera capaz de librarla de una manera nueva. /Baricco, Homero Ilíada

Esa guerra la ganamos con un caballo de madera, descomunal, relleno de soldados. La ganamos gracias al engaño, no con la lucha a pecho descubierto, leal, caballeresca. Y esto a ellos, a los jóvenes, nunca les gustó. /Baricco, Homero Ilíada

Héctor (…) le dijo: «(…) Nadie logrará matarme si así no lo quiere el destino; y si el destino lo quiere, (…) ningún hombre, desde el mismo momento en que nace, puede escapar a su destino. Por muy cobarde o valiente que sea. Nadie. (…)» /Baricco, Homero Ilíada

Y yo caí del carro —yo, un héroe— (…). La última cosa de la que guardo recuerdo son los veloces, terribles caballos corcoveando de lado, nerviosos. Luego la fuerza me abandonó y, con ella, la vida. /Baricco, Homero Ilíada

cuando no hay nada que pueda hacerse, hacer algo es hacer demasiado para no hacer demasiado, lo que queda es acomodarse y mirar las contingencias como quien mira el paisaje sin otra actividad mientras dura el viaje

Todos esos momentos se perderán en el tiempo, como lágrimas en la lluvia. Es hora de morir. /Rutger Hauer (Roy Batty en ‘Blade Runner -1982) https://www.microsiervos.com/archivo/peliculas-tv/rip-rutger-hauer.html

HELENA (…) vi a los ancianos de Troya, reunidos allí para mirar lo que ocurría en la llanura. Eran demasiado viejos para luchar, pero les gustaba hablar y en eso eran maestros. Como cigarras posadas en un árbol, no dejaban de hacer oír su voz. /Baricco; Homero Ilíada

TERSITES(…) Yo era el hombre más feo (…) allí, al asedio de Troya: (…) Quiero explicaros lo que yo sé, para que así también vosotros comprendáis lo que yo comprendí: la guerra es una obsesión de los viejos, que envían a los jóvenes a librarla.Baricco; Homero Ilíada